Ubicada en el partido de Lomas de Zamora, Turdera es una de las localidades con mayor identidad dentro del conurbano bonaerense. Esta historia comienza con en la colocación de la piedra fundamental de la Iglesia de la Conversión de San Pablo, el 30 de enero de 1910. Su desarrollo comenzó cuando las hermanas Inés y Eugenia Turdera heredaron los terrenos donados por su tío Luis Puig y, junto al constructor Riziero Preti, impulsaron la urbanización en torno a la parada ferroviaria del Ferrocarril del Sud.
El crecimiento de la localidad estuvo ligado al transporte. En 1910, el Municipio de Lomas de Zamora habilitó una línea de tranvías a tracción a sangre que unía la estación Temperley con la villa Turdera. Posteriormente, la línea se extendió al Anexo del Hospital Español y hasta la estación Adrogué, funcionando hasta 1924 y contribuyendo a la conexión del barrio con su entorno.
En sus primeras décadas, Turdera fue conocida como Loma de Las Hormigas debido a la elevación del terreno. Entre sus construcciones emblemáticas aún se conserva la casona de Riziero Preti, ubicada en la avenida 9 de Julio 440, que ha sido declarada de valor histórico por el Municipio y la Provincia de Buenos Aires, manteniendo vivo el legado arquitectónico de la zona.

A lo largo de los años, la localidad se consolidó como un centro educativo de referencia en el distrito, motivo por el cual se la conoce como la “ciudad escuela”. Además, alberga la segunda sala de primeros auxilios más antigua de Lomas, inaugurada en 1942, que continúa brindando servicios esenciales a la comunidad local.
El patrimonio cultural de Turdera también incluye la presencia del busto del general San Martín en su plaza principal, una obra del escultor José Fioravanti, quien participó en la creación del Monumento a la Bandera en Rosario y del Monumento al Lobo Marino en Mar del Plata. Esta pieza se ha convertido en un símbolo representativo de la localidad.
Entre sus espacios verdes, el Parque Finky se destaca como uno de los principales puntos de recreación. Ubicado junto a las vías del tren, recibe a miles de visitantes cada semana, ofreciendo un entorno natural en medio del conurbano. Con más de un siglo de historia, Turdera continúa evolucionando, manteniendo su identidad y su arraigo en la historia bonaerense.

Jorge Luis Borges encontró en Turdera un escenario ideal para sus relatos de duelos, coraje y tradiciones suburbanas. Aunque otras localidades como Palermo o Adrogué suelen estar más asociadas a su obra, en Turdera halló personajes e historias que lo marcaron profundamente, con sus calles de tierra y el rumor de viejas leyendas, quedó plasmada en cuentos, poemas y milongas del célebre escritor.
Uno de los puntos clave de su vínculo con la localidad es la intersección de las calles Frías y Preti. Allí se situaba el rancho de los hermanos Iberra, personajes reales que Borges transformó en figuras casi míticas en Milonga de dos hermanos. En ese relato, los ecos de una Turdera de malevos y valentía resuenan con fuerza, reafirmando su lugar en el imaginario del escritor.
El 2 de mayo de 1969, Borges llegó a Turdera para firmar ejemplares en la librería Estévez y reunirse con estudiantes del Colegio San Jorge. En esa ocasión, presidió un concurso literario en el Club Alumni, donde entregó premios y conversó con los jóvenes sobre literatura y escritura.

El año pasado, la localidad de Turdera celebró su 50° aniversario con un evento organizado por el Municipio que reunió a vecinos en una jornada festiva. Hubo un desfile, feria y espectáculos en vivo, además de la elección de la bandera insignia de la ciudad. En este proceso participaron miles de personas a través de 25 instituciones, aportando sus ideas para el diseño final. La propuesta ganadora fue la de Sasha Spagna, vecina de la comunidad. Durante el evento, el intendente Federico Otermín destacó la importancia de fortalecer el crecimiento de Turdera sin perder su identidad.
A propósito de la celebración por el 115 aniversario de Turdera, desde el Municipio invitó a la comunidad inscribirse a dos visitas guiadas por sitios, monumentos y edificios históricos de la localidad. La iniciativa, organizada por el Centro de Gestión del Municipio (CGM) en Turdera, propone descubrir el patrimonio cultural del barrio, resaltando lugares emblemáticos y su valor en la identidad de la comunidad.